El transporte multimodal hace referencia al envío de mercancías a través de más de uno de los cuatro modos principales: marítimo, ferroviario, por carretera y aéreo. Aunque puede aplicarse a escala regional, se utiliza principalmente en el transporte internacional de mercancías.
El objetivo es reducir los plazos de entrega y optimizar la logística para garantizar que las mercancías lleguen a su destino con la mayor eficiencia posible.